No es así. No es un mal chico, aunque tenga más tatuajes que el arponero de Moby Dick y comienza con una frase de rapero enfadado: “Jamás hay que fiarse de las apariencias. Por ejemplo, me ven con los tatuajes, pero me gusta la música suave. Conozco todas las piezas de Michael Jackson, incluyendo las más lentas, de memoria”. Jamás fiarse de las apariencias, pero en el fondo a él también le ha pasado: “Cuando veía a Ibrahimovic en TV, pensaba que era un bastardo arrogante, en cambio es una persona excepcional, gentil y divertido”.
Dejar a un lado los clichés debe ser uno de los pasatiempos favoritos de Kevin-Prince Boateng, revelación del Milan del pasado año, y que intentará repetir.“Estoy en el puesto justo, en el equipo adecuado, con los compañeros justos: si trabajo duro, puedo convertirme en uno de los mejores del mundo. Es ese mi objetivo, si no fuera así, ¿para qué jugar al fútbol?”.
Mientras tanto, ha tenido un éxito enorme en su primer año en el Milan. Se ha convertido en un jugador importante, un icono. ¿Se da cuenta de todo esto?
“Si hace un año me hubieran dicho: irás a jugar al Milan, ganarás un scudetto y te convertirás en un ídolo, le hubiera preguntado qué tipo de drogas usas. En cambio todo eso me ha pasado y me di cuenta en las vacaciones, cuando tuve tiempo para reflexionar. Le repetía a mi mujer: ‘Mira lo que hemos hecho. Es fantástico ser un ídolo para los niños, hace tiempo quizás los padres hubieran dicho: ‘Ha hecho estupideces en el pasado, está tatuado, tiene aspecto de duro, no puede ser tu modelo’. Pero la gente ha visto como soy, ha visto mi carga positiva, ha entendido que soy uno que lucha y que vive su sueño”.
¿También fue un sueño el Mundial de Sudáfrica, hace un año?
“Fue el primer paso de esa gran chispa que espero sea mi gran carrera, fue una gran ocasión para África. Creo que ahora la gente mira el continente de otra manera: pensaban que vivíamos todos en tiendas de campaña, en cambio África ha construido estadios maravillosos y ha mantenido el peso de una gran manifestación”.
¿Recuerda su encuentro con Mandela? Winnie Mandela le ha pedido que se casara con su nieta…
“Obviamente era una broma, de todas formas le expliqué que yo ya estaba casado. En cuanto a Mandela, jamás había visto a una persona que transmitiera tal sentido de paz. Fue un honor solo hablar con él y poder estrecharle la mano”.
Eligió jugar con Ghana en lugar de Alemania: ¿Se siente africano o por cuestión de fútbol?
“Soy medio alemán, me siento europeo y también africano, quizás pensar en jugar con Alemania era algo más lógico. Pero tuve una oportunidad y la aproveché. Podía jugar en la Selección, y era un modo de saber más sobre mis raices”.
¿Se siente un símbolo del fútbol africano como Weah?
“Complicado compararme con él o con Eto’o. Nací y crecí en Europa, la primera vez que visité Ghana fue hace pocos meses. Me siento más un símbolo de la sociedad multicultural”.
¿Siente de poder dar más en un futuro a África?
“Ya lo pienso: quiero construir una escuela en Ghana”.
De pequeño, su ídolo era Pelé
“Creo que sigue siendo el más grande de siempre, pero los tiempos cambian y otros campeones llegan. Ahora mi ídolo es Cristiano Ronaldo, uno que puede jugar en todas partes, que tiene talento, pero es el primero en llegar al vestuario y el último en marcharse, y seguramente hará dos sesiones de abdominales en lugar de una. Cuida todo, porque ama su trabajo”.
A propósito de abdominales, ¿sabe que también se ha convertido en un sex symbol?
“Esa es otra divertida historia. Cuando llegué aquí estaba más gordo: pesaba 90 kilos y mi agente me dijo: ‘chico, eso no está bien’. Ahora peso unos 84. Una vez me quité la camiseta después de marcar en un Portsmouth-Tottenham. Hay una foto similar a una de las que me tomaron en San Siro sin camiseta y cuando la vi pensé: Dios, que barriga tenía”.
¿Moral?
“Moral es lo que soy gracias al trabajo. Sé de donde vengo, y estoy orgulloso de todo lo que hecho hasta ahora”.
¿Le gustaría volver al centro del campo si Allegri se lo pidiera?
“Si me lo pidiese sí, aunque no me gusta tanto, porque mi sitio favorito es estar por detrás de los delanteros”.
¿Eso significa que preferiría un Mister X que fuera volante?
“Miren, no necesitamos de un Mister X. Fabregas, Ganso, Hamsik… Si llega nos echará una mano, pero ese no es el problema. Aquí lo tenemos todo: jugadores expertos y jóvenes, jugadores de calidad y luchadores”.
¿Entonces no hacen falta refuerzos?
“El problema no es el Mister X, lo importante es el equipo: este Milan es fantástico y si jugamos como equipo, podemos obtener cualquier resultado. Ver correr así a un Inzaghi con 39 años te hace pensar que todo puede ser posible para nosotros. Yo vomitaría si corriera tanto como él”.
¿Es un fan del scudetto o de la Champions?
“Pongo el campeonato por encima de todo: es por el campeonato por el que trabajas a diario, es el campeonato lo que se celebra cada semana”.
Pero la Champions históricamente es el objetivo favorito para el Milan: ¿Qué le falta al club para competir con el Barcelona?
“Es cuestión de cabeza. No tiene nada que ver lo buenos que somos o lo bien que podamos jugar. Hay demasiada presión cuando jugamos la Champions, ese es el problema”.
¿El fútbol español es el mejor de Europa?
“Antes de venir a Italia, pensaba: que aburrimiento, todos los partidos acaban 1-1 o 1-0. Pero después comprendí: en Italia, los equipos son fuertes y todos defienden hasta morir. El Barcelona puede hacer cinco goles cada partido, en Italia eso es imposible”.
¿Y el fútbol inglés que ya conoce?
“Divertido para verlo, veloz, siempre combatido. Pero técnicamente o tácticamente, Arsenal aparte, hay poco. No, el fútbol italiano es el más completo, tiene todo que hace falta”.
Quizás si ganara otro scudetto, seguirá bailando. ¿Lo volvería a hacer?
“Estaba realmente nervioso, pero al final fue divertido. Todo hay que hacerlo en el momento adecuado, esa noche aunque mi Moonwalk hubiera sido horrible, todos habrían dicho que fue perfecto. Pero yo lo hice realmente bien, ¿no?”.
Boateng, ¿qué es lo más importante en su vida?
“¿Los tatuajes? Es una broma, una pregunta complicada. Creo que ser feliz es tener a gente feliz a tu lado. Ser feliz, creer en ti mismo y en lo que haces son las cosas más importantes. Me gusta cantar y bailar en el vestuario, no siempre, pero de vez en cuando. Creo que la gente se lamenta demasiado de su vida. Cierto, a mí me pueden decir que soy un futbolista, que gano mucho dinero, para ti es todo muy fácil, pero cuando vuelves a casa por la noche, tienes una familia cerca y comida en la mesa, deberías ser feliz. He visto gente en Ghana que no tiene nada, pero siguen adelante de todas formas. De verdad, la vida debería ser tomada en su justa medida. Diviértete, sonríe, disfruta, yo lo hago así. Y funciona”.
Fuente: Gazzetta dello Sport
No hay comentarios:
Publicar un comentario